Gran parte de la educación que recibimos a lo largo de nuestra vida se basa en estudiar mucho para conseguir un buen trabajo, cuyas prestaciones nos aseguren una jubilación que nos permita vivir nuestros últimos días con tranquilidad.
No obstante, una de las principales lecciones que se pueden aprender de los libros del escritor y asesor de negocios Robert Kiyosaki es que es necesario realizar un cambio de mentalidad; es decir, sacar al lector de su zona de confort y darle las herramientas necesarias para que se convierta en un emprendedor, es decir, en constructor de su propio camino.
Efectivamente, si queremos acceder a un sistema de seguridad social, de pensiones, tenemos que conformarnos con trabajar toda nuestra vida para alguien más, para el proyecto de otra persona que tendrá un alcance muy limitado en nuestra vida. En muchos casos, estos trabajos “de por vida” generan una frustración en los empleados, que se sienten sin alas.
Por si fuera poco, las pensiones no se encuentran del todo estables: hemos visto casos como la crisis de Grecia en los últimos años, así como la de Argentina a finales del siglo XX, en donde las pensiones fueron golpeadas por los errores financieros cometidos desde la clase política. Es por ello que si estás pensando en que tu trabajo y tus aportaciones de seguridad social son una seguridad para tu futuro, estás en un error.
Ante esta incertidumbre de conseguir un buen trabajo o ser un emprendedor, nos permitimos poner a tu consideración algunos puntos clave que puedes meditar para saber cuál es el camino que se acopla mejor a tu carácter y a tu actitud.
No cabe duda de que existen empresas con excelentes prestaciones que te permiten tener una seguridad salarial, esa remuneración económica que sabes que recibirás en un momento determinado sin importar si trabajaste mucho o no, si hubo buenas ventas, o si fuiste el empleado del mes o uno más dentro de la empresa.
Esta condición es la que se suele buscar sobre todo cuando se terminan los estudios universitarios, cuando los jóvenes buscan una estabilidad que les proporcione un punto de apoyo para crear sus proyectos. Es bueno tomar experiencia trabajando dentro de los esquemas empresariales, pero hay que tener cuidado si esto nos impide seguir creciendo.
Este es uno de los elementos característicos del emprendedor. Debes estar consciente de que cuando decidas entrar en este camino pasarás por momentos de incertidumbre, momentos que te pueden desanimar y hacerte claudicar de tus sueños y proyectos. Por ello, la carrera del emprendedor es más de resistencia que de velocidad y, sobre todo, de tener metas fijas acerca de lo que quieres lograr. La aventura y la incertidumbre son las dos palabras que más asustan a los jóvenes y por lo cual deciden buscar opciones que les otorguen mayor seguridad.
Decía Catherine Cook, cofundadora de MyYearbook, hoy día convertido en MeetMe: “Para cualquier emprendedor: si quieres hacerlo, hazlo ahora. Si no lo haces, te vas a arrepentir”. Estas son palabras que nos hacen reflexionar acerca de una cualidad importante en el emprendedor: la capacidad de decisión.
Esa decisión se manifiesta desde el momento en que decides comenzar tu proyecto. Uno de los beneficios de elegir este camino radica en ser tu propio patrón, en que nadie más que tú pone las reglas y sobre todo los límites de tu proyecto.
Todo emprendedor debe conocer su capacidad para resolver problemas. En la primera etapa te darás cuenta si estás listo o no para el mundo de los negocios; en cambio, cuando cuentas con un empleo dentro de alguna empresa estás sometido a diversos límites, ya sea por tu departamento, por el tipo de trabajo que realizas e incluso por las afinidades que tengas con tus compañeros de trabajo.
Aunque actualmente existen tendencias dentro de algunas empresas acerca de fomentar la creatividad de sus empleados, estás dentro de un esquema que no fue establecido por ti y por ello tienes que acoplarte… aunque no estés del todo de acuerdo.
Esperamos esto te sirva y te acerque a conocer la importancia de atreverte a ser emprendedor, sobre todo en la economía globalizada del siglo XXI. En los últimos años hemos visto cómo diversas economías tanto de primer mundo como en vías de desarrollo se tambalean y generan incertidumbre, llegando al extremo de modificar los sistemas de seguridad social y pensiones.
Por ello te invitamos a pensar en la posibilidad de tomar un camino distinto, que aunque no es más fácil, sin duda te hará crecer.
Información de www.soyentrepreneur.com