Los libros sin promoción son como la frase proverbial: árbol que cae, nadie lo escucha caer en el bosque; es como si no existieran. Actualmente el reto para editores y autores es comprender cómo poner a trabajar las redes sociales y los medios digitales para promover su trabajo, algo que se ha probado complicado debido a la inercia que vive el mundo editorial del papel.
En 2011 Seth Godin, un renombrado mercadólogo, creó una iniciativa junto con Amazon llamada The Domino Project con el objetivo de cambiar y redefinir la manera en que se crean, producen y promueven los libros por internet. Al final de ese año, cada uno de los libros creados en The Domino Project, fueron los más vendidos en Amazon el día que salieron a la venta, tanto en su versión de papel como en digital.
Uno caso es el libro End Malaria, una compilación de ensayos de 61 de los escritores más populares en Estados Unidos. Creado por la asociación Malaria No More, el libro tenía el objetivo de recaudar dinero para instalar mosquiteros y proteger a la gente en África de la malaria.
El proyecto no quería gastar dinero en publicidad tradicional, así que convocó por redes sociales a un grupo de 67 influenciadores en varios países con una misión: promover el libro en redes sociales sin mayor incentivo que una copia digital gratuita. End Malaria fue durante sus primeros dos días el libro más vendido en Amazon y recaudó poco más de un cuarto de millón de dólares – 12,500 copias- solo a través del sitio web de Amazon.
Un libro que tiene una comunidad alrededor de él, atraerá a otras personas. Al darle libertad para escribir a los influenciadores, se produjeron decenas de testimonios que atrajeron a más personas al libro y que hicieron lo propio creando una reacción en cadena. Su disponibilidad en internet, lo hace accesible, es fácil descubrirlo, comprarlo y comentarlo sin importar en que parte del mundo se esté hablando de él.
Las redes sociales no son una bala de plata que cualquiera puede operar solo dando clic a botones en una pantalla: para promover un libro en internet debe haber una intención concreta, cuantificable, medible y predeterminada. La participación de los autores en la promoción en medios digitales es invaluable y necesaria, pero ese es un tema para otro día.
La promoción de un libro no es incompatible con el mundo digital, sino todo lo contrario. Encontrar la manera de crear comunidad alrededor del contenido, en lugar de solo empujarlo, es la clave de una comunicación exitosa.
Fuente Forbes.com